China reduce previsión de crecimiento 2019 y anuncia estímulos fiscales

China reduce previsión de crecimiento 2019 y anuncia estímulos fiscales

Mientras baja la tensión por la guerra comercial entre China y Estados Unidos, las autoridades del país asiático reconocieron que la segunda mayor economía mundial se sigue desacelerando y anunciaron medidas para apuntalar el crecimiento.

En la apertura de la reunión anual de la Asamblea Popular Nacional de China, el primer ministro Li Keqiang redujo el objetivo de crecimiento a un rango de entre 6% y 6,5% para 2019, abandonando la práctica anterior de usar una sola cifra, y dándole además al gobierno un mayor margen de maniobra. Si el país crece efectivamente 6% sería su menor ritmo de expansión en treinta años, y marca el giro en la prioridad de las autoridades desde el crecimiento hacia el control de los riesgos de la deuda, la limpieza del medio ambiente y la reducción de la pobreza.

Se produce, además, en un contexto de menor demanda interna y mundial, y en medio de la tensión comercial con Estados Unidos. El año pasado, el PIB se expandió 6,6%, su ritmo más lento desde 1990, debido a la guerra comercial y a las medidas que adoptó el gobierno para controlar los riesgos financieros, lo que elevó los costos de los préstamos corporativos y perjudicó la inversión.

La campaña para frenar a las industrias contaminantes también golpeó al sector manufacturero. Advirtiendo además una "dura batalla económica por delante", Li anunció recortes de impuestos por casi US$ 300 mil millones para el año y la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) al sector manufacturero, al transporte y la construcción. A eso se suma un aumento en la inversión en infraestructura y un incremento de los préstamos a las pequeñas empresas. Ante los 3 mil delegados presentes en el Gran Salón del Pueblo, donde se realizan las sesiones anuales del Parlamento, Li se comprometió además a mantener la moneda "generalmente estable y en un nivel adaptable y equilibrado".

Por ahora, la mirada de los analistas ha sido positiva, ya que aseguran que el gobierno mostró su pragmatismo al establecer un rango meta de crecimiento y al mismo tiempo mostró su decisión por asegurar que la desaceleración sea gradual.