Alrededor de 118 millones de mujeres podrían caer en condición de probreza en Latinoamérica

Alrededor de 118 millones de mujeres podrían caer en condición de probreza en Latinoamérica

Si no se toman las medidas necesarias, más 118 millones de mujeres podrían pasar a vivir en condición de pobreza por causa de la crisis sanitaria. Esto se desprende del informe sobre la perspectiva laboral femenina en América Latina, difundidó por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

De acuerdo a este organismo, ciertos sectores económicos pueden ser mayormente impactados en lo referente al volumen de su producción y empleo como resultado de las medidas que se adoptaron para contener la pandemia. La presencia femenina es significativa en dichos sectores, como lo son el comercio, la manufactura, el turismo y el servicio doméstico.

Las mujeres ocupan el 56,9% de los empleos en los sectores de mayor riesgo en América Latina, caracterizándose estos por sus elevadas tasas de informalidad, precarias remuneraciones y escasa calificación. La CEPAL calcula que la tasa de desempleo entre las mujeres cerró en el 2020 en un 22,2%.

Asimismo, la caída del PIB regional en 7,7%, así como el incremento de la desocupación en un 10,4% afectarían negativamente los ingresos de las familias. Asegura el informe de la CEPAL que: “Dada la sobrerrepresentación femenina en los hogares pobres, cerca de 118 millones de mujeres de la región caerán en la pobreza”.

En tal sentido, es urgente que se destinen recursos públicos con el propósito de tomar las medidas necesarias para enfrentar la presente crisis sanitaria desde una perspectiva de género, tal como lo precisa el citado informe.

Según expresó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, “Las mujeres de América Latina conforman una parte esencial de la vanguardia que contiene a la pandemia”.

Añadió que son mujeres el 73,2% de las personas que se desempeñan en el sector de la salud, quienes han trabajado en condiciones extremas, así como prolongadas jornadas de trabajo y quienes además están expuestas a un mayor riesgo de contagio del virus.

En dicho informe se recalca que el trabajo doméstico remunerado, que suele caracterizarse por una elevada precarización y el cual es imposible de realizar de forma remota, es uno de los sectores que más ha sido afectado por la crisis.

Antes de desencadenarse la pandemia, en el 2019, cerca de 13 millones de personas estaban empleadas en el sector relacionado al trabajo doméstico remunerado (91,5% mujeres). Del total de las mujeres ocupadas en América Latina, un 11,1% se dedicaba a trabajar en este sector.