El precio promedio de los vehículos nuevos en Estados Unidos se mantiene en niveles históricos, rondando los 50.000 dólares, y se espera que los aranceles impulsados por la administración del expresidente Donald Trump generen nuevos incrementos a partir de junio.
Según la firma de análisis de datos Cloud Theory, a comienzos de mayo el costo medio de los automóviles de gama media superó ligeramente la barrera simbólica de los 50.000 dólares.
Aunque por primera vez en cinco semanas esta cifra ha descendido levemente por debajo de ese umbral, el analista Rick Wainschel advirtió que el efecto de los aranceles podría seguir empujando los precios al alza en los próximos meses.
Wainschel indicó que la estabilidad actual en los precios, cercana a los 50.000 dólares, se debe a que aún se están comercializando vehículos fabricados antes de la aplicación de los nuevos aranceles, lo cual ha permitido a las automotrices lanzar campañas promocionales.
Sin embargo, fabricantes como Ford y Hyundai ya han advertido que estas ofertas especiales están por concluir: en el caso de Ford en julio, y en el de la marca surcoreana, en junio.
“Con el fin de los programas de precios, el agotamiento del inventario previo a los aranceles y algunas marcas y modelos que ya están aplicando subidas, este momento no parece un punto de estabilidad, sino una pausa”, afirmó Wainschel.
Y concluyó con una advertencia: “Una cosa es casi segura: este verano no solo subirán las temperaturas”.
Autos de segunda mano igual suben
El efecto de los aranceles impulsados por la administración de Trump no solo está afectando a los vehículos nuevos, sino que también comienza a reflejarse en los precios del mercado de segunda mano.
De acuerdo con datos de Edmunds, en el primer trimestre del año, el precio promedio de los autos usados con tres años de antigüedad superó los 30.000 dólares, reduciendo por primera vez desde 2022 la brecha con los vehículos nuevos a menos de 17.000 dólares. En concreto, el valor medio se ubicó en 30.522 dólares, lo que representa un incremento del 2,3 % en comparación con el año anterior.
La firma advirtió que este aumento sostenido en los precios de los autos usados probablemente continuará, impulsado por la escasez de inventario y el impacto de los aranceles.
“Si añadimos el impacto inminente de los aranceles sobre los precios y la disponibilidad de vehículos nuevos, queda claro que los ligeros aumentos de precios registrados en el primer trimestre podrían ser el inicio de un cambio más amplio en el mercado de vehículos de ocasión”, señaló Edmunds.
